Manifestación en Lanzarote por el precio de los alimentos

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Lanzarote importa la práctica totalidad de los alimentos que consume. Así pues, está a expensas de las importaciones. Al haber tenido uno de los desarrollos más espectaculares que se recuerda (de no tener electricidad a estar inundada de piscinas y jacuzzis, en tres décadas), también ha registrado un incremento de lo que se denomina “calidad de vida”, o estándar medio alto de consumo. El “paraíso” de Lanzarote consiste en una gran maquinaria industrial de carácter global que permite a una isla que carece de agua y producción alimentaria propia hablar inclusive de “sostenibilidad”, y ser “reserva de la biosfera”. El problema es que la Biosfera, esto es, la Tierra con sus seres vivos, tiene problemas de “sustentabilidad”, y no puede sostener indefinidamente modelos de importación masiva como el que se pretende en Lanzarote, sólo a cambio de sol y playa.

 

Esta “insostenibilidad” tiene su reflejo en los costes operativos del mantenimiento de los territorios que engullen recursos de otras partes del Mundo. Son, naturalmente, costes crecientes, en un ambiente limitado, con demanda en aumento (población mundial y ratio de consumo por habitante) y oferta menguante (declive energético, ratio declinante de granos por persona, etc.).

 

La singularidad de Lanzarote es que la isla se desenvuelve a medio camino entre el “gran lujo” propio de los entornos de turismo de cierto poder adquisitivo, el “límite insoportable del endeudamiento” (propio de sociedades muy ajenas a la realidad) y la prodigiosa “saturación y declive” habitual en entornos fabulosamente artificiales. Es un territorio que ha generado enormes riquezas inmobiliarias – y las consecuentes pobrezas hipotecarias de algunos, en estos nuevos tiempos; que ha crecido en consumo de todos los recursos posibles, y que se ha prodigado en la frugalidad y el exceso propio de las fiestas orgiásticas, por la rapidez y la exuberancia doméstica, exhibida en los hogares y en el parque de vehículos. Se trata de una Isla en la que sus oriundos han abandonado la Capital insular para refugiarse en chalets. Una isla sin agua pero con miles de piscinas, pródiga en vientos, pero también en aire acondicionado, y a punto de colapsar eléctricamente por el empeño en consumir más energía, y en donde cada uno quiere enseñar más, aunque algunos se debatan ya en mantener lo poco no endeudado que tienen.

 

Se generó una isla de “sobrecoste”, y con ese sobrecoste se mantiene su empleo, empresariado y dirigentes de todo tipo. Es una isla con una alta crispación, también propio de los lugares de altas fortunas y negocios rápidos: un inmigrante en patera que llegara con lo puesto pensaría, al ver las descalificaciones que se vierten entre sí los lanzaroteños, que está ante una gran torre de Babel. También el inmigrante en cuestión, al ver los supermercados llenos de alimentos, apenas entendería esa protesta vecinal.

 

Sin embargo, los problemas llegan con la inflación, la ralentización – paralización del crecimiento en la construcción, el deterioro turístico, etc. Detrás de ese complejo fenómeno, la entrada en la era de la “carestía” energética, de materias primas, de alimentos, etc. que tiene su origen en causas naturales: demasiada presión sobre la Tierra. Entonces se desata la caja de Pandora, y los reproches se multiplican: que si es la libertad de comercio, que si es la falta de libertad de comercio; tal empresario de tal isla, o el “monopolio” o no entrada de tiendas de “descuento duro”.

 

Lanzarote es muy vulnerable, aunque el principal punto flaco ya no fuera siquiera su casi absoluta carencia de recursos endógenos valorables en la era de la escasez creciente (materias primas, agua, suelo agrícola, etc). Su principal carencia, no exclusiva por otro lado de esta isla, es la falta de comprensión por parte de la población de que el estado de las cosas en las que vive es “insostenible”, y por tanto, no se puede mantener. En eso consiste ser “sostenible”: en poder sostenerse. Pero un “desarrollo” como el de Lanzarote – que engulle más de un millón de litros diarios de petróleo sólo para tener agua, carburante y electricidad – carece de las más mínimas posibilidades de automantenerse.

 

Quizás lo más importante ahora sea recordar a los lanzaroteños que el Mundo ha entrado en una era de creciente competencia por los recursos, debido a los límites naturales existentes. Y que no estar preparado para ello tiene sus duras consecuencias. También sería muy aconsejable la automoderación, la austeridad, el reparto y el ejercicio de la reflexión sobre estas últimas décadas. Y el diálogo entre la población, con información sobre las tendencias globales. Porque la cuestión que se debate va mucho más allá del abuso de tal o cual importador de alimentos, y tiene un carácter estructural importante para la sociedad isleña.

 

¡Gran Manifestación en Arrecife por el fin del monopolio alimentario en Lanzarote!!!

Date Edited

·04 dic 2007 04:45:11 PM

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This work is in the public domain. <!– ¡Gran Manifestación en Arrecife por el fin del monopolio alimentario en Lanzarote!!! anónim@ anónim@ text/plain –> PRÓXIMO SÁBADO 15 DE DICIEMBRE. A PARTIR DE LAS 11 DE LA MAÑANA. SALIDA DESDE EL CABILDO VIEJO Y FINALIZACIÓN FRENTE A LA CÁMARA DE COMERCIO (CALLE JOSÉ ANTONIO)

Lema: Con las cosas de comer no se juega.
Esta manifestación se convoca al margen de cualquier fuerza política. Es una manifestación de ciudadanos demandando algo tan básico como es el derecho a la alimentación. ¡Por unos precios dignos!

Estamos hartos de gastarnos cuatrocientos o quinientos euros al mes para poder comer. Estamos hartos de que no se permita a los supermercados de descuento duro entrar en la isla por culpa de unos políticos que benefician a los de siempre.

¿Seguiremos quejándonos en los bares o les obligaremos de una vez a tomarnos en serio?

Hazte oír. Propaga la noticia. Por fin va a llegar la manifestación que tanto esperabas.

Sin consignas políticas y sin manipulaciones.

Sólo por la comida. Supermercados de descuento duro. ¡Libre competencia ya!

PRÓXIMO SÁBADO 15 DE DICIEMBRE. A PARTIR DE LAS 11 DE LA MAÑANA. SALIDA DESDE EL CABILDO VIEJO Y FINALIZACIÓN FRENTE A LA CÁMARA DE COMERCIO (CALLE JOSÉ ANTONIO)

Si estás de acuerdo con nosotros colabora distribuyendo este mensaje como mejor creas conveniente. Aunque no puedas ir, aunque tú no tengas problemas para comprar en los supermercados porque tu sueldo te llega de sobra… piensa en los demás, piensa en lo injusto de la situación. Piensa que esto se puede solucionar si todos nos ponemos a ello.

Somos un grupo muy reducido de personas, sin afiliación política de ninguna clase, que ya está harta de esta situación. No pienses que tenemos poder o que vamos buscándolo… sólo queremos lo mismo que tú, y sin tu colaboración no vamos a ninguna parte. Piensa en ello. Tenemos once días para movilizar a toda la ciudad por una causa noble como ninguna puede serlo.

Crea tus propios mensajes o copia este. Distribúyelos, fotocópialos, manda sms… es la única forma. De lo contrario… todo seguirá igual, con los hiperdino, los marciales y demás machacándonos como hasta ahora. De ti depende que esto vaya a algún sitio o se quede en una simple anécdota. Hagamos saber a los poderosos que estamos aquí y que estamos vivos.

¡¡¡HAZTE ESCUCHAR!!!  CANARIAS7: “NO LLEGO A FIN DE MES”Unas 300 personas se manifestaron ayer en el centro de Arrecife para protestar por la carestía de la cesta de la compra, por el monopolio de la alimentación y para exigir comercios de descuento duro. La marcha fue aparentemente espontánea. Con gritos como «no llego a fin de mes», «fuera monopolios», «descuento duro ya» o «poca decencia, libre competencia» transcurrió la espontánea concentración que pudo reunir a entre 200 y 300 personas aproximadamente ayer en el centro de Arrecife. Sin aparente organización, (al menos ningún grupo se atribuyó la coordinación de la protesta, que se propagó por medio de mensajes de teléfono móvil y correos electrónicos), sin pancartas ni banderas, y sin megafonía, un grupo de personas y muchas familias con niños fueron concentrándose al filo de las 11.00 horas frente a la sede del cabildo viejo, en un ambiente casi más festivo que de protesta. Pasados algunos minutos de la hora fijada para la concentración, una señora tomó la iniciativa y propuso a los reunidos que se desplazaran hasta la sede de la Cámara de Comercio en la calle José Antonio, para protestar por el abusivo control de precios que encarece la cesta de la compra en la isla. A partir de ese momento, los congregados comenzaron a moverse lanzando consignas en contra de la carestía de los precios de los productos, de los políticos y responsables públicos que han propiciado la imposibilidad de acceder al mercado insular a empresas de descuento duro y el duopolio que se mantiene en el sector de la alimentación en la isla. A la llegada a la sede de la Cámara de Comercio los ciudadanos congregados siguieron protestando con lemas en defensa de los derechos de los consumidores, mientras algunos participantes en la protesta, de forma improvisada, tomaban la palabra y arengaban a los reunidos para que siguieran protestando. Poco después del mediodía la marcha acabó por dispersarse sin mayores consecuencias, ni cortes de tráfico. La concentración de ayer es la primera que se produce en años para protestar por la compleja y difícil de entender situación del mercado de la alimentación en la isla.LA OPINIÓN DE LANZAROTE 

Ninguna manifestación

Fernando Marcet ManriqueMás de uno me ha preguntado, en los últimos días, si yo tengo algo que ver con ese asunto en contra del monopolio que sufre Lanzarote respecto al mercado de la alimentación, que se celebrará mañana sábado delante del Cabildo viejo. En teoría es una pregunta sencilla. Sí tienes algo que ver o no tienes algo que ver, no hay más vueltas. Pero el caso es que las hay. En primer lugar, sería bueno señalar que lo de mañana no es una manifestación. No lo es, porque si lo fuera, sería ilegal. No ha sido oficialmente convocada por ninguna persona física o jurídica en el plazo mínimo que exige la ley. Nadie se presentó en la Delegación del Gobierno y dijo: somos tales y cuales, queremos convocar una manifestación. La ley es bastante tajante al respecto:LEY ORGÁNICA 9/1983, DE 15 DE JULIO, REGULADORA DEL DERECHO DE REUNIÓN (BOE núm. 170, de 18 de julio), EN SU REDACCIÓN DADA POR LA LEY ORGÁNICA 9/1999, DE 21 DE ABRIL (BOE núm. 96, de 22 de abril)CAPÍTULO IV: DE LAS REUNIONES EN LUGARES DE TRÁNSITO PÚBLICO Y MANIFESTACIONESArtículo octavo.La celebración de reuniones en lugares de tránsito público y de manifestaciones deberán ser comunicadas por escrito a la autoridad gubernativa correspondiente por los organizadores o promotores de aquéllas, con una antelación de diez días naturales, como mínimo y treinta como máximo. Si se tratare de personas jurídicas la comunicación deberá hacerse por su representante.Según la ley, cualquier aglomeración concertada de más de veinte personas es considerada una reunión, y las reuniones que sean celebradas en espacios públicos deben ser avisadas con antelación a las autoridades competentes para que estas tomen las medidas de seguridad oportunas.¿Y qué pasa entonces con las espontáneas celebraciones de los aficionados de fútbol? ¿O con los botellones que se hacían en toda Canarias hasta que fue prohibido el consumo de alcohol en las calles? ¿No son reuniones? Pues no. No lo son. Tales fenómenos son considerados legalmente como “encuentros semifortuitos”. O sea, una serie de gente que, yendo en grupitos reducidos, se encuentra en un mismo espacio. Nada de reuniones. Yo no sé si el sábado por la mañana, antes de las once, habrá algún partido de fútbol, pero quizás no sería mala idea que quienes piensen acudir a la calle León y Castillo lleven una bandera de cualquier equipo, o alguna camiseta, para así poder esgrimir una buena excusa en caso de emergencia. Les diría que llevaran cervezas o botellas de ron, pero como ya he dicho, beber en la calle está prohibido. Por si no ha quedado claro, lo vuelvo a explicar, lo de mañana no es ninguna manifestación. Ni ninguna reunión. Será, como mucho, un encuentro casual de gente que pasaba por allí. Así que si a alguien le da por gritar eso que he escuchado de “por unos precios dignos” o “con la comida no se juega”, probablemente será porque ese alguien esté mirando algún escaparate y se refiera a los precios de dichos productos, o bien porque esté recriminando a su hijo de cuatro meses hacer pedorretas con la compota de verduras. Ninguna manifestación.Eso sí, si me preguntan, les diría que motivos hay de sobra para montar una manifestación como es debido. Y si me preguntan si yo tengo algo que ver con lo de mañana tendría que reconocer que sí, pero sólo si ustedes me reconocen antes que lo de mañana no es ninguna manifestación. Yo lo único que hice fue sugerir a unos amigos, menos de veinte, actuar de una vez. Montar un pollo bueno con pancartas y todo lo demás… pero, que quede claro, legalmente. Ir a la Delegación de Gobierno, constituir alguna asociación de usuarios, yo que sé, algo serio. Luego, al parecer, la idea original fue circulando, a su aire, de un lado para otro. Y, de eso, lo siento mucho, pero nadie puede responsabilizarme. Y después de este intento patético por salvar mi propio cuello en caso de que lo de mañana se salga de madre, me reitero en la necesidad de que hagamos algo para evitar los precios abusivos y la paupérrima calidad de nuestros supermercados. Ahora mismo, mientras escribo estas líneas, me han salido un par de anuncios en la tele, de productos que se venden en ciertos supermercados de descuento duro que jamás veré en Lanzarote. ¿Qué les parece? Oigan, si nos prohíben los supermercados de descuento duro, al menos no nos dejen ver sus anuncios… Eso se llama sadismo, y uno va a empezar a creer que alguien disfruta con todo esto.Por ahí he leído que si lo de mañana tiene algo que ver con la inminente apertura del Argana Centro. O si es un complot urdido por cierto partido para evitar que se hable de otras cosas (en qué penosas circunstancias he escuchado ese mismo argumento en los últimos años). Miren, si lo de mañana, que no es una manifestación, tiene que ver con algo, es con la espontaneidad. Yo, que creo ser el autor del mensaje original, estoy sinceramente cabreado con la situación del mercado de la alimentación en Lanzarote. Y si dicho mensaje se ha propagado como lo ha hecho es que algo está pasando en la isla. Algo realmente grave. Yo soy el primer sorprendido por el eco que alcanzó la noticia. Un follón así no se monta con manipulaciones o estrategias interesadas. El hartazgo de la gente es genuino, y las razones de ese hartazgo son reales, contundentes. No se manipula algo así. A veces una pequeña chispa puede provocar un gran incendio, pero sólo cuando hay acumulado suficiente material inflamable. El cabreo, no la manipulación, es lo que ha propagado el mensaje, y ese hartazgo hará que seguramente mucha gente se encuentre mañana a las once en la calle Real. Una vez allí no creo que vaya a ocurrir gran cosa. Nadie llevará megáfonos. No se leerá ningún manifiesto. No habrá líderes carismáticos exaltando a las masas. Ni falta que hacen. En Lanzarote, los líderes, o quienes se las dan de tales, son los que acaban estropeándolo todo. La gente irá esperando que haya algo organizado, a ver si se reparten folletines o se alzan pancartas. Pero no sucederá nada de eso. No habrá gestos grandilocuentes ni enfrentamientos melodramáticos, pero los que allí estén se reconocerán y sabrán que están por el mismo motivo. Luego se irán a sus casas, o a tomar unas cañas por ahí tranquilamente, pero de algún modo satisfechos. Sabrán que son unos cuantos, y que están en disposición de ejercer presión. Eso será suficiente. Y la próxima vez, porque sin duda habrá una próxima vez, la próxima vez sí que habrá alguna manifestación.Publicado el Viernes, 14 de Diciembre de 2007, a las 9:00 am, y archivado en la sección Sociedad.Siga cualquier comentario a esta entrada por medio del feed RSS 2.0.Puede introducir un comentario, o hacer trackback desde su sitio web.

14 Comentarios

1.      sara10:30 | 14 Diciembre 2007 | Permalink No se lo que haran otros. pero yo ire a mostrar mi indignacion, estoy hasta el moño de que me estafen con la cesta de la compra.2.      rodrigo10:38 | 14 Diciembre 2007 | Permalink Yo también iré. Aunque no se grite ni nada, al menos estando ahí dejas claro que estás descontento con la situación. A ver si los políticos y los empresarios se ponen las pilas de una vez con este tema.3.      Duvitativo smith11:12 | 14 Diciembre 2007 | Permalink …y digo yo, ¿no sería mejor decidir un día, todos juntos, no ir a comprar a los supermercado del timo, vulgo marciales e hiperdino y sus secuaces?4.      Duvitativo smith11:13 | 14 Diciembre 2007 | Permalink …pero hacerlo solo un día, a modo de protesta y castigo,…(es que antes me expliqué mal…las prisas y eso…)5.      alfil11:24 | 14 Diciembre 2007 | Permalink Seguro que eso sería más efetivo, Duvitativo, pero primero tendremos que saber cuantos somos, y si de verdad hay voluntad por parte de la gente para hacerlo. Estas cosas hay que articularlas de algún modo, y lo de mañana puede ser un buen comienzo.6.      Albert15:35 | 14 Diciembre 2007 | Permalink Al final parece que el Argana Centro abrió. Otro motivo más para ir mañana a la calle Real a reivindicar el fin del mamoneo entre los políticos y los empresarios de siempre… al final es esa la razón del monopolio alimentario.7.      Puppet16:38 | 14 Diciembre 2007 | Permalink No son listos ni nada los Spínola esos. Abren un viernes por la tarde, para que los medios no puedan sacar la noticia, sabiendo que el fin de semana están todos bajo mínimos de personal. Lo tienen todo pensado los jodíos.8.      julian16:45 | 14 Diciembre 2007 | Permalink Chacho yo ire esta tarde, a lo mejor abren con unas ofertas guapas,9.      you el indio0:00 | 15 Diciembre 2007 | Permalink es bastante desilusionante, cabreante, y sobre todo ilustrante (ante, ante, ante….ecooo), ejem, que tengan que darse este tipo de situaciones para darse uno cuenta que no todos semos ni serememos iguales ante la ley. Ejemplo: si yo quiero cambiar mínimamente la distribución de la fachada de mi casa, una ventana convertirla en ventanal y una puerta cambiarla de ubicación, desde el ayuntamiento no sólo me pondrán una y mil pegas, sino que para cuando me concedan los permisos estaré criando malvas; ahora, si soy un powerman verbigracia me se salen los fajos de 500 euracos por las orejas, convierto una nave industrial, garaje, garito, una mezquita, un monumento artístico nacional, una ensaladera, un futbolín, un microondas, una minipimer,…eteces, eteces.. en un centro comercial, con dos cojonazos, que passa…y que nadie me rechiste que le paso mi bemedobleuve por encimba
haber quien es el espabilao que me chafa el negociete…je,je,je,je,
y no lo voy a abrir por capricho, no, lo abriré por el bien de los ciudadanos y su cesta de la compra, me entiendes, porque me se sale a mí que hay que salvar la economía de los susodichos consumidores
no se si me explico, pero a buen entendedor le amanece más temprano y buena sombra le cobija.
salud y felices consumisiones navideñas (en mi centro lateral comercial)10.  anonimo13:02 | 15 Diciembre 2007 | Permalink Esto es un comienzo, aunque pequeño, es un comienzo. Se entienderia la negativa a las grandes superficies si con ello se beneficiase el pequeño comercio, pero este ya esta quemado, doblemente además porque la gente pierde poder adquisitivo y el dinero se mueve menos solo pagan alquiler e hipoteca, no consummiendo por tanto otros bienes. Y por otro lado las familias o personas que tienen estas PYMES tambien tienen que comprar la comida, al mismo precio que los demás.
Si a todo eso unimos que la isla depende totalmente del sector terciario y en parte de la construcción, que coño dicen por ahí de dependencia. YA DEPENDE TOTALMENTE. Así que animo a todas las personas que actuan creyendo en una idea que favorece a la mayoria, dado que lo que se hace con buena intención bien hecho esta.11.  Fernando Marcet15:48 | 15 Diciembre 2007 | Permalink Me parece que no exagero un pelo si califico como éxito la “no manifestación” de esta mañana. Teniendo en cuenta la escasa difusión por parte de los medios de comunicación convencionales, y que se trataba de un acto no convocado oficialmente, el resultado ha sido de lo más ilusionante. Y nos confirma lo que ya sospechábamos… hay mucha gente en Lanzarote harta de esta situación. Sí, ha sido un acto contra el monopolio de la alimentación, pero se puede extrapolar a muchos más ámbitos. Ámbitos en los que intereses políticos y empresariales se unen con demasiado frecuencia, perjudicando al más importante de todos… el interés común. Calculo que cerca de quinientas personas recorrimos el tramo que va desde el Cabildo viejo hasta la Cámara de Comercio. Quinientas personas que entre palmas y rimas más o menos improvisadas han puesto el primer ladrillo de algo que sin duda será mucho más grande. Ahora sólo falta que tras este primer paso montemos una asociación de consumidores de Lanzarote, y desde esa asociación convocar una manifestación como es debido, con rueda de prensa, difusión, etc… entonces ya veremos… el 2008 puede ser un buen año. Sobretodo, es imprescindible, en caso de que se monte esta asociación, que desde un principio permanezca al margen de los intereses empresariales y políticos insulares. Y será muy difícil… muchos cantos de sirena habrá que desoir por el camino, muchas tentaciones que buscarán manipular desde el principio. Pero si sabemos hacer ese ejercicio de independencia, todo lo demás vendrá solo.12.  Fernando M.12:55 | 16 Diciembre 2007 | Permalink Aunque poco, algo de eco ha tenido la noticia. Aquí una reseña en Canarias 7 en su edición digital.13.  Leticia20:35 | 16 Diciembre 2007 | Permalink Me sorprendí mucho al leer la noticia de Canarias 7 esta mañana, me da la impresión de que no estuvimos en la misma manifestación.Es verdad que no hubo ni pancartas ni megafonía, pero en el ambiente se respiraba rabia y ganas de cambios. Todas estas personas se reunieron para protestar y hacerse entender, de ahí a decir que el ambiente era casi festivo, me parece un tanto ofensivo para la gente que estuvo allí el sábado por la mañana. Era una protesta, no un sábado de compras.Estuvimos caminando hasta la cámara de comercio, cortando la calle josé antonio durante un buen rato. Y todo eso bajo vigilancia policial. Sin mayores consecuencias, pero sí con cortes de tráfico, mientras estuvimos allí, no pudo circular ningún coche.Su último error fue decir que los participantes tomaban la palabra de forma improvisada. No fue así. Al llegar delante de la cámara de comercio, alguien se adelantó y dió la cara, representando al grupo que organizó esta manifestación. Esta persona fui yo y la gente presente lo entendió muy bien. Me gustaría decir que soy la portavoz de un grupo de personas, hartas de gastarse medio sueldo para poder comer dignamente. No somos nadie… ni partido político, ni empresa… sólo gente de la calle, madres y padres de familia, jóvenes trabajadores que necesitan un cambio inmediato. Las cosas tienen que cambiar y lo vamos hacer.La manifestación del sábado fue para nosotros un éxito. A partir de un simple email se generó una fuerza muy positiva para el cambio. Ahora hay que seguir, lo del otro día fue sólo una primera toma de contacto.La segunda manifestación será para finales de enero, y esperamos que se movilice mucha más gente. El precio de la cesta de la compra es un problema de todos y tenemos que actuar.
Hago un llamamiento a todas las personas que quieran participar a la próxima manifestación, que contacten con nosotros y haremos que las cosas cambien en esta isla.14.  Nuria8:49 | 17 Diciembre 2007 | Permalink Estamos hartos de comprar comida casi pasada de fecha a precio de productos delicatessen, verduras que llevan demasiado tiempo arrancadas de la mata, a las que no les queda ni una enzima viva que nos aporte lo que se supone la fruta y la verdura fresca deben aportar. Dentro de un mes estaremos allí para gritar ante quien tengamos que gritar que muevan los culos de sus cómodas sillas para hacer algo de una vez. Pero, sinceramente creo que a quienes tenemos que reivindicar que hagan algo para solucionar esta situación es A NUESTROS POLÍTICOS, que son a los que votamos. Son ellos los que deben permitir la entrada de otras cadenas de alimentación modificando las actuales regulaciones. Está claro que hemos perdido absolutamente la confianza en los políticos si este tipo de reivindicaciones tenemos que hacerlas ante el empresariado. ¿Quién debe velar por el interés público?